habéis devorado....

madurez.....

madurez.....

"madura!" nos escupen a la cara cada vez más pronto. "deja de comportarte como un niñx" nos ladran. nos van imponiendo valores, ideas, costumbres ridículas y absurdas, asesinando nuestra inocencia, nuestra niñez, juegos, fantasías, cuentos, sueños...
nos convierten en personas enfermas, dignas de un mundo enfermo. Nos imponen una ideología, una religión, una forma de pensar. Nos destruyen a mazo de realidad, su realidad, una enferma y autodestructiva, una en la que no hay lugar para juegos, ni para sonrisas; sólo lo hay para el trabajo, las corbatas anudadas en el cuello a modo de horca, sólo maletines negro apático, sólo caras muertas en rostros pálidos que hacen juego con un mundo pálido, con relaciones interpersonales muertas y vacuas, con días fríos y aburridos, con hábitos putrefactos, egoístas y sin sentido...
Poco a poco van cambiando sueños por ganas de comprar, juegos por miedos a lo absurdo, pinturas por teléfonos móviles, cuentos por Playstation... Terminando por conseguir clones de otros clones, pegatinas diseñadas a la imagen del modelo, convirtiendo personas en simples "ciudadanos". Cada sueño desaparece, las risas dejan de sonar, los saltos, los gritos, las historias de caballeros, de indios, de animales, poco a poco dejan de gustarnos, y nos convertimos en un mayor más, con los sueños enterrados, la sonrisa desentrenada, las necesidades falsas, superfluas e impersonales; los juegos olvidados...

La persona que podríamos haber llegado a ser fue asesinada, nos impusieron unas normas, unas leyes, un ritmo de vida. Nos inculcaron los miedos que todos tienen, los anhelos que todos poseen, la lógica de la que todxs hacen uso. Nos destruyeron lo especial, lo que nos hacia ser nosotrxs, lo que nos diferenciaba; ahora somos copias de otras copias, clones de otros clones.
Enterramos nuestras ilusiones y nos encaminamos a la vacuidad total, a la farsa, al teatro que significa el día a día en esta realidad.

"padres, profesores, psicólogos y educadores....Asesinxs!!!!
padres, profesores, psicólogos y educadores....Policías!!!!" (Producto Interior Bruto)

La pena llueve...

Y claro, nos rayamos. El día a día es difícil, agotador.
Se escapa de tu boca otro suspiro, y vuelta a levantar. La vida no es fácil ni bonita, abunda la lluvia, el gris y el humo. Son muchos los colores fríos, las paredes duras, los corazones amargos. Los nudillos ya duelen y la sangre en el muro no seca. Y claro, las lágrimas caen irremediablemente, es normal... y humano, pero no por eso menos doloroso, menos punzante.
Y sigues caminando, paso a paso, paso a paso, aunque el suelo queme, aunque el aire abrase y tus pulmones sangren. Paso a paso, del único modo posible. Y vuelves a caer, tropiezas y tu frente sangra, una vez más. No sonríes, ya no (escuece, claro, es normal.). Con las palmas en el suelo, te miras en el charco, ves tu cara adusta, dura, claro, es normal: ya son demasiadas las caídas, las fuerzas ya no te permiten sonreír, ya no. Las primeras veces sí, te sorprendía ver tu reflejo sin luz, sin brillo, pero ya no, hace tiempo que te has acostumbrado, claro, es normal. Los primero días sí, te lastimaba la rapidez, el sentir que el tiempo se pasaba, y que para ti no era distinto, que la arena caía, grano a grano, sin perdonar; pero ya no, claro...es normal.
El sonido de los coches, el rápido ir y venir de vidas frenéticas, el bocinazo, el grito, el sonido de la lluvia helada sobre el frío asfalto, tu respiración y el sonido amargo de tus pasos. El blanco de los pasos de cebra, el negro hormigón, el sonido de los charcos, la fría tapa de alcantarilla, el banco mojado, tu ojos secos. Todo te queda lejos, y claro, te rayas. La ciudad es dura, irrespirable, y tu pena no es para menos, y claro, es normal.
Aún recuerdas los saltos, risas y esperanzas, quedan muy lejos, demasiado, como lo estás tú: lejos, muy lejos de aquí. Hace frío, por fuera y por dentro, y claro, te rayas, es normal.

ciudadano...

Ciudadano normal, eres la culpa, el miedo, el odio y el fracaso.
Ciudadano normal, eres la sombra, la muerte, la rutina, el mal.
Ciudadano, eres las cadenas, la máquina, el asfalto, el cristal.
El Progreso, el trabajo, la tecnología, el silencio, la complicidad.
La costumbre te hace preso y tú vives preso, ciudadano normal.
Eres la simpleza, las marcas, el látigo y la espalda ensangrentada.
Eres la urbanización, la cuadrícula, la idiotez personificada.
El cannon, el molde, un número de 13 dígitos.
Eres gris monocromo, sin tonalidades ni variación alguna,
sólo aburrimiento, normalidad y actitudes políticamente correctas.
Ciudadano normal, eres la envidia, el egoísmo, la máscara sonriente.
Ciudadano, eres conformismo, el dinero, pesadillas y amargura.
Eres hielo frío y moderno, pero quemas, abrasas...y matas.

"EL SISTEMA ES SÓLO LA ESTRUCTURA
¡VOSOTROS SOIS LA DICTADURA!"

...

Pensamientos de hormigón.

"La fábrica está en todas partes. Es la mañana, el tren, el coche, el paisaje destruido, la máquina, los jefes, la casa, los diarios, la familia, el sindicato, la calle, las compras, las imágenes, la paga, televisión, el lenguaje, las vacaciones, la escuela, los trabajos caseros, el aburrimiento, la cárcel, el hospital, la noche. Es el tiempo y el espacio de la supervivencia cotidiana. Es la costumbre de los gestos repetitivos, de las pasiones rechazadas, y vividas por delegación, por imágenes interpuestas..."

El miedo...

Temblando en plena noche, presa de un terror absurdo, de ese miedo clandestino que ya de sobra conoces, pero que no entiendes...

¿Qué es el miedo? ¿aquella barrera que te impide ser como eres en realidad? ¿aquella sombra que te persigue día y noche? ¿aquella voz interna que te susurra que no lo intentes?

Nos limita, nos fulmina y nos congela; nos revienta los sueños, nos marchita los deseos, nos encuadra el espíritu, nos mata... y, sin embargo, forma parte de nosotrxs, porque somos nosotrxs lxs esclavxs y nosotrxs lxs verdugxs; son nuestras las cadenas que atan nuestras alas, son nuestras propias mentes... somos nosotrxs mismxs.

Somos nosotrxs el miedo en plena noche, somos nosotrxs la sombra en cada esquina, nosotrxs el susurro que oímos en la penumbra, nosotrxs la voz que nos habla desde el armario, la mano que nos ase desde bajo de la cama. Somos nosotrxs esos pasos que oímos estando solxs en casa, somos el que nos vigila yendo por la calle oscura, somos la causa de que prendamos la luz de la mesilla, somos nosotrxs el fantasma que nos sigue y nos aterra... somos cada grito... el terror...

Somos todas las mentiras que escupimos, a lxs demás y a nosotrxs mismxs, somos nosotrxs, sólo nosotrxs...

Somos nuestro enemigo, nuestro monstruo, nuestro infierno; somos nuestro asesino que mutila nuestros sueños; somos nuestra oscuridad, Mr Hyde y Doctor Jekyll, nuestro odio, nuestro miedo; el malo de nuestra historia, somos el gris muerte que nos brota (del corazón), somos la Parca acechadora, el veneno que destilan en cada impulso las neuronas, que oscurece y emponzoña cada uno de nuestros músculos, pensamientos... Somos nosotrxs el hormigón que nos entierra aún en vida en la tumba del conformismo, del estatismo, del miedo a cambiar. Somos nuestro enemigo, el que asesina a nuestro niño, el cual sólo quería volar, somos el Holocausto de anhelos y suspiros, nuestra gran mentira, lo que impide conocernos plenamente (nos mentimos y tapamos esas mentiras con otras, haciendo de la farsa y la patraña nuestros pilares de la vida), somos el secundario de nuestra propia película, el payaso de este circo de mentiras; somos el represor de las sonrisas espontáneas transformándolas en odio hacia el extraño y su alegría; somos la anhedonía, el que impide disfrutar de los placeres de este mundo, de la vida; somos nosotrxs el miedo que nos convierte en presas fáciles para nosotrxs mismxs, somos lo terrorífico que envenena nuestras noches, el chillo espeluznante que nos despierta y que, en realidad, viene de nuestras tripas: somos nosotrxs gritando de agonía porque somos mutiladxs por nosotrxs cada día...

No existe otra salida que empezar a cambiar el mundo, matando al policía que reside en nuestra mente, ya que es él a quien alimentamos con nuestra firma de dudas y de histeria, con nuestro apoyo a este estado de las cosas, alimentamos las cadenas, cavando más el hoyo donde sepultamos los colores, convirtiéndonos en tinieblas sin pasiones, negando nuestra propia naturaleza, convirtiéndonos en hielo, en otra presa más del miedo, limitada por una mente conquistada por las armas de nuestro propio policía... eliminando nuestras alas, encasillando nuestros actos con el molde de la normalidad, matando nuestras ansias de cambiar... y así, somos nosotrxs el que nos quita el voto en ésta nuestra (su) vida; es el miedo a equivocarse, el miedo a arriesgarse, a sentir lo que no pueda planearse, ni controlarse...delegando nuestras riendas en individuos más capaces, prendiendo fuego a la poesía que es la vida, nuestra vida, que se convierte en velatorio, que se transforma en pesadilla, en pantomima, en mentira, en parodia... y todo por el miedo...

Folie à Trois

Bueno, es el primer grupo que subo y quería dejar el honor a una música que me hay marcado mucho, y que aun después de ya algún tiempo me encanta escuchar, son Folie à Trois, un grupo de rap con una potencia lírica preciosa. El último disco es precioso, muy personal e intimista, con letras que me siguen erizando la piel ("siempre queda tinta", "Universos infinitos", de donde he cogido el nombre del blog; "Gris dans ma vie", "Luces de neón", etc); el anterior es más crítico y hay algunas canciones que son realmente muy buenas, como "busco la paz y el conflicto", "oye primo" y "vidas paralelas". Bueno, sin más introducciones, les dejo la página donde bajar todos los discos:

http://klinamen.org:8080/folieatrois/

Sangre de brea...

Abres los ojos y lo que ves te da un puñetazo en la cara.
Ahí estás, tú, y el espejo.
Pueden ser muchas cosas las que ves ahí, pero no, tú no,
eres incapaz de creer que aquel engendro, aquella criatura es tu rostro.
Y de fondo suena un piano, notas suaves, melancólicas,
haciendo la banda sonora de tu historia, historia triste, gris y pútrida...

¡No! tu cuepo no lo aguanta, simple corazón de mortal, late a un ritmo insostenible,
bombea aceite de motor, negro y amargo, y tu pupilas explotan.
¿En qué te has convertido?
Negro, negra sangre en un corazón negro.
Frío, hielo circulando por venas de cristal.
Una pequeña gota resbala por tu cara, pero no, no le crees, sabes que es mentirosa, embaucadora, te dice que eres aún humano, y tú sabes que no.

¿Qué te han hecho, amor mío?
Te han quemado los ojos, y sólo ves llagas abiertas y sangrantes.
Te han quebrado las alas y ya no puedes volar.
¿Qué se siente, mi vida, saber que eres un monstruo?
¿Qué se siente, amor, saber que no eres tú?
¡Ay! Qué escalofrío más horrible te hace temblar bajo la ducha,
qué sentimiento más atroz el que te cubre:
Te das cuenta de que el mundo te ha hecho de piedra,
geología tenebrosa, fría y con mal olor.

¡Sociedad!
Eres cáustico engendro que asesina sin complejos,
eres muerte, eres miedo, estandarte del dolor.
¡Normalidad! Bajo la bandera del prejuicio encadenas indefensxs,
creas pánico, eres odio, limitas a la vida y al amor.
¡Miedo! El peor de los males y se encuentra dentro nuestro,
roba, quema y destroza sueños, es el virus que nos come y nos lleva al ataúd.

¡Ay! Sentirte muerta, estando aún en vida...
¡mira lo que te han hecho!
¡mira lo que te hacen sentir!
Te convierten en basura, en bandera de su causa:
la Muerte, el Egoísmo y la falta de Amor.
Sentirte una mancha, un agujero, ¿eso quieres?
Sentirte un monstruo y no encontrarte nunca más;
volverte fría, tonta y seca, todo esto
y más horrores te esperan todos a ti sola, si únicamente sabes tragar...

Eres todo lo que algún día odiaste,
representas todo contra lo que juraste luchar.
La máquina te ha hecho un engranaje sin colores,
un tornillo, un esclavo, un ladrillo más.
La locura que te come, la angustia que ahoga y el ardor de la cal que te llena;
el no verte en el espejo, el sentirte sola, fría y hueca;
el miedo, el odio que te colman;
la frustración, el dolor y la dureza de corazón.
Quieres explotar, esfumarte, desarmarte en mil y un pedazos.
Quieres desaparecer...
Te entiendo perfectamente, candor,
a veces, el cuerpo se queda tan pequeño... y sientes algo tan grande...
que sientes poder llenar el mundo
con sólo una porción de todo tu dolor.
Mira lo que te han hecho, pequeña estrella.
Sé cómo duele,
yo también lo siento, amor...

Tempestad interna, hace tiempo dejó de ser soportable.
El viento sopla desde los cuatro puntos cardinales, tu interior escandalizado, y no hay dios que lo componga.
Las noches con ojos encendidos, los días perdidos en tus líos. El bullicio mental es ensordecedor, el revuelto de ideas, inteligible. Y ya no puedes más...

En medio de la guerra que es tu cabeza, decides coger el arma y tu piel ya se eriza. Cargas la punta con tinta, las ideas gritan apabulladas. Clavas el filo de tu lanza destruyendo la pulcritud de la hoja de papel...y se desata la bestia. Tu muñeca describe giros, rectas, spines, bucles inimaginables. Garabatos caóticos escupen caos de la pluma. Rasgan el aire, el silencio, el folio aséptico y a ti mismo.
Al principio no sabes cómo, eres inexperto, novato en esto de vaciar y crearte. Aprendiz de marinero en el mar de las palabras, no encuentras ninguna frase que te convenza. Mas ¡No te rindas! Si sueltas la pluma en este momento, tu mente explota, no hay vuelta atrás.
Al comienzo cuesta, y es duro ver que lo que garabateas es, simplemente, una mierda; pero con constancia, práctica y un poquito de cultura, la palabras brotan. Pactas con ellas, ambos firman un acuerdo de paz, la concordia poética.

Ahora es más fácil, las palabras fluyen, se deslizan suavemente desde tu mente al papel en delicados arroyos de palabras que cruzan tu brazo, se introducen en tu pluma y completan el cuaderno.
Palabras, pequeñas o más complicadas, coloridas o blanco mate, alegres o amargas como hiel, todas son bonitas, preciosas. Haces el amor con todas ellas, se masturban mutuamente, se acarician y dedican lindas frases al oído. Palabras afiladas, suaves, burbujeantes o sulfúricas. Te dañan, te llenan, te lamen o rasguñan. Palabras que riman, o que pelean cual batalla entre perros hambrientos. Que las utilizas constantemente, que acabas de aprender o que olvidaste ya hace tiempo.
Todas ellas se juntan, se combinan para formar escritos de sangre, de tu sangre. Se combinan para formarte; sí, sí, formarte, porque te van creando. Esos textos que escupes eres tú, tus sueños, miedos, sentimientos y angustias, eres tú escrito en prosa, verso libre o en rimas pares. Trazo a trazo, tu ser se plasma en un blanco folio; trazo a trazo vas creando el caligrama de tu vida.
Eres lo que escribes.

Esto comienza...

Bueno, inicio con estas palabritas mi blog.

Hace ya tiempo llevo escribiendo, dibujando, sintiendo… la vida de hoy es demasiado anodina, sinsal, aburrida. Estos escritos son cantos al caos, a la destrucción, a la diversión, a la vida. Son reivindicaciones de un loco, ansias y sueños de alguien que anhela otro estado de las cosas, otro tipo de relaciones, distintas a las vacías, egoístas, odiosas y autoritarias que hoy en día nos (des)conectan.

Este blog se llenará poco a poco de estupideces, inquietudes, escritos propios, fragmentos perturbables, discos de música inspiradora, imágenes indescifrables; en pocas palabras, se llenará de mí, de un ego soñador, humilde y cariñoso, pero a la vez complicado, angustiado y doliente, que unas veces rozará el sollozo, otras la rabia incongruente; pero bueno, la vida para el que piensa no es fácil, lo sé, lo sabes, lo sabemos.

Gritos a la rebeldía, al sexo, a la poesía y al tirachinas; al spray, a las pajas, al supermercado y a la prosa; a mí, a ti, a los sueños y a la muerte; al tiempo, a las ciudades, a la rutina y al ciudadano. A la música, a la pintura, a la escritura y a la risa.

A veces hay tantas cosas que te llenan que tiene uno que explotar o desahogarse, yo opto por ambas, ambas tienen su encanto. Aquí está el fruto de esa guerra. No espero que se comprendan, que se compartan ni que agraden, sólo espero que sirvan para llenar algunas mentes caóticas y surrealistas, llenar o por lo menos conectar.

Si no les gusta, no se preocupen, es normal; además, no lo hago para gustar.
:)